AQUÍ HUELE A TIMO

A la hora de hacernos con un automóvil de segunda mano, enseguida dudamos sobre su kilometraje y su integridad mecánica.
Por eso desde aquí queremos daros unas recomendaciones básicas para poder prevenir un posible timo.

Primeramente debemos ver si los kilómetros que figuran en el “cuenta” concuerdan con lo que aparenta el coche. Si hay alguna duda inmediatamente debemos ir al justificante de la ITV, en el que figurarán los kilómetros reales. Da igual que se truque el cuentakilómetros porque no se puede falsear el documento. El hecho de comprobar este dato parece muy obvio, pero no solemos hacer esta verificación.

Por otro lado, podemos tantear el terreno mediante detalles que el coche muestra a pesar de que se intenten tapar.
Uno de ellos por ejemplo, es el desgaste que ofrece la goma del pedal del freno. Si esta está muy nueva, significa que la han cambiado recientemente y que por lo tanto, ese coche tiene bastantes kilómetros. Si por el contrario está muy vieja, ni que decir.

También podemos ver si el coche ha tenido un uso por ciudad o por carretera si prestamos atención al desgaste del volante. Si está desgastado uniformemente su uso habrá sido metropolitano, si lo está por los laterales, por carretera.

La palanca del cambio también puede ofrecer datos reveladores, ya que si la movemos en punto muerto sin meter ninguna velocidad y está algo suelta, es síntoma de que tiene muchos kilómetros a sus espaldas.

Las gomas de los guarnecidos de las puertas (cuya misión es impedir que el agua penetre en el habitáculo) se desgastan y se deforman con el tiempo. Así pues si al abrir la puerta nos fijamos en el estado de la goma sabremos la edad del coche.

Por último, como todo buen comprador, querremos saber si ese coche ha tenido algún golpe fuerte. La única manera de saberlo, es abriendo el capó y fijarnos en los tornillos que juntan la chapa del lateral con el motor. Si estos aparecen desgastados y parece que se han desatornillado, ese coche ha recibido un golpe en ese lado.

Esperamos que estos sencillos gestos os sirvan para destapar lo que sería un gran timo y para compraros un coche de segunda mano que de verdad merezca la pena.