martes, 1 de marzo de 2011

NUESTRAS RUEDAS II



A hora vamos a centrar nuestra atención en como llevar a cabo la sustitución de un neumático cuando no tengamos más remedio que hacerlo nosotros.
En el caso de que un neumático reviente, deberemos mantener la calma y no frenar de golpe para evitar que el coche derrape. Trataremos de controlar la trayectoria con el volante y frenar lentamente mientras corregimos la trazada.

Una vez inmovilizado el coche, nos pondremos el chaleco reflectante, los triángulos, y comenzaremos con la sustitución.
o Lo primero es saber dónde está la rueda y cómo sacarla. Por lo general estará bajo el suelo del maletero y se soltará mediante el giro de un tornillo que hará que esta caiga al suelo. Aflojamos los tornillos pero no los quitamos.

o Para instalar el gato nos fijaremos en una de las 4 marcas que hay en los bajos del coche, dos delante y dos detrás. En función de qué rueda hayamos pinchado lo podremos delante o detrás.


o Ya instalado, conviene fijar el coche al suelo para que no se nos mueva, mediante una piedra o un calzo, sino disponemos de ninguno no pasa nada.


o Una vez hayamos subido el coche y sacado la rueda, la pondremos debajo de él para asegurarnos que no toque el suelo en caso de que el gato se caiga.


o Ahora colocaremos la nueva lo más centrada posible y apretaremos los tornillos levemente.


o Bajamos el coche y apretamos al máximo

A continuación deberemos buscar una gasolinera para hinchar esa rueda, porque al 90% de los conductores se les olvida hincharla cuando llenan de aire las otras 4.
Conviene cambiarla por una nueva cuanto antes, sea de galleta o no, porque no tendremos el paralelo correctamente.

Además es importante saber que tendremos que cambiar la rueda pinchada y la del otro lado, pues de lo contrario no tendrán el mismo dibujo y no pasaremos la ITV.
Siempre hay que circular con las ruedas delanteras idénticas y las traseras idénticas, no haciendo falta que sean las 4 iguales.

Si queremos cambiar solo 2 ruedas, conviene poner las nuevas en la parte trasera y las que estaban más desgastadas en la delantera, ya que en caso de reventar el coche no derrapará.

Si tenemos las 4 ruedas casi nuevas y pinchamos una, no es necesario cambiar la rueda, ya que podremos optar a que nos tapen el pinchazo con un parche

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