Todo el mundo sabe que Leo Messi es el mejor jugador del mundo. Es capaz de sobrepasar con gran robustez a cualquier jugador rival y a la velocidad de la luz sin apenas desestabilizarse.El secreto de este éxito reside en su innegable técnica y en sus entrenamientos personales. Lo que muchos no saben es que Messi en sus ratos libres se “entrena” con un flamante Audi Q7. Y es que anualmente, cada jugador del Barcelona recibe gratuitamente (el valor del coche no debe superar los 60.000€, de lo contrario tendrán que pagar la diferencia) el Audi que desee con una configuración a su “antojo”. Los jugadores se benefician de estos coches gracias al acuerdo entre la marca germana de automóviles y el club catalán. El negocio es simple; publicidad por cochazos.
Y es que los coches son fotografiados irremediablemente al mismo tiempo que se hace una foto a cualquier jugador.
Parece que Messi ha encontrado un coche acorde a su personalidad (no sabemos si lo ha hecho a propósito o simplemente el destino ha decidido juntar a estas dos “bestias”)
Porque el Q7 es el todoterreno más grande de la firma de los cuatro aros. Sus medidas son imposibles para una ciudad como Madrid o Barcelona, a no ser que se disponga de una plaza de garaje generosa porque mide más de cinco metros de largo y pesa 2.295 kilos.
Para poder mover este “tanque”, Audi ha empleado el vigoroso y poderoso motor 3.0 TDI. Un diésel turboalimentado de 240 caballos capaz de superar los 210km/h con un consumo mixto bastante contenido de 9.8 litros a los 100 kilómetros.
Como buen 4x4 tope de gama, incorpora de serie tracción integral a las cuatro ruedas denominada Quattro.
Para los más curiosos, el color elegido por Leo es el azul muguello, algo más claro que el azul marino convencional.
Y para aquellos que quieran emular a su ídolo y deseen tener un coche igual, deberán desembolsar la cantidad de 58.490 euros –sin extras-.
No hay comentarios:
Publicar un comentario